Las guitarras baratas tienen una característica definitoria: no cuestan mucho dinero.
Las buenas guitarras suenan bien y se mantienen afinadas. Las guitarras de mierda suenan mal y tienden a desafinarse.
Las guitarras baratas son estadísticamente más propensas a ser una mierda, pero no tanto como para que uno pueda considerar el precio, por sí solo, como un predictor preciso de la calidad.
Esta es una guitarra barata y de mierda:
Es una Epiphone Les Paul Special atornillada, del tipo que solía venir en un paquete de inicio, en la década de 1990, completa con un amplificador y un paquete de accesorios, por alrededor de $ 150. Tenían pastillas genéricas, electrónica simplificada, sintonizadores absolutamente terribles y no estaban muy bien configurados. Difícil de tocar, imposible de afinar, mala guitarra. Utilizo una como guitarra de proyecto, así que puedo practicar reparaciones y modificaciones en una guitarra que no importa.
Esta es una guitarra cara y bonita:
Un PRS Custom 24 SE. ¿Quizás $850? (Tenga en cuenta que muchos guitarristas consideran que esta es una guitarra de precio bajo a medio, pero para nuestros propósitos, es costosa). Es una gran guitarra. Suena bien, toca bien, ajuste y acabado hermosos, todo un instrumento brillante. Mi principal compañero de guitarra toca uno, y golpea.
Esta es una guitarra buena y barata:
Ibáñez AS73. Tengo el mío usado por $350. Es más caro que el Epiphone, pero sigue siendo barato, según los estándares de casi cualquier jugador. Se ve bien, suena sólido (las pastillas son de cerámica, por lo que no tiene esa claridad de AlNiCo, pero tiene un gran golpe y tonos limpios decentes), se mantiene en sintonía asombrosamente (una vez lo dejé en una bolsa de concierto en un armario para tres meses y me salió afinada), es mi guitarra favorita. Es tan barato como lo es debido a los avances en la fabricación de guitarras, lo que significa que cada vez hay menos trabajo manual en una de estas, y también porque los fabricantes internacionales se están aprovechando del mercado laboral global. Es una imitación hecha en Indonesia de una Epiphone Dot, que a su vez es una imitación de una Gibson 335, de una empresa japonesa.
Esta es una 'guitarra' cara y de mierda. No tiene componentes electrónicos ni hardware, y el clavijero está roto y, sin embargo, un cabeza de chorlito en Reverb todavía quiere $2799 por él, solo porque es de 1962. Lo sé, lo sé, es antiguo, pero el comprador tiene dos opciones: cárguelo con piezas antiguas y gaste otros $ 6000 ++, o use piezas modernas, y luego, ¿por qué ir con el cuerpo antiguo en primer lugar? Además, el clavijero roto es un problema mayor de lo que uno podría pensar, porque estas guitarras tienen mástiles pegados, lo que significa que este es un
trabajo de reparación
no trivial . Que es la jerga tecnológica para "este va a ser un proyecto caro y difícil". Totalmente absurdo.
Las guitarras pueden ser baratas o caras por razones que no tienen nada que ver con el sonido, la facilidad de ejecución o la estabilidad de afinación.
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